
Partía a la escuela, no tenia ni el más mínimo interés de estar en casa y verle al rostro. Fue una noche para jamás recordar… Sentir como me acariciaba y abusaba de mí fue… asqueroso, pero mi madre tarde o temprano me lo agradecerá.
Hace unos 5 años mi padre falleció en un accidente automovilístico, mi madre no lograba superar lo sucedido, de a poco sus ganas de vivir se desvanecían. Pasó el tiempo y encontró un nuevo amor, su nombre… Antonio, era alto, moreno y en sus ojos había algo de tristeza. De a poco se fueron enamorando, se casaron y el prometió cuidar de mi…
Aunque hasta anoche, me di cuenta de que jamás su intención fue esa, si no que una muy diferente.
Ayer por la tarde se veía diferente, estaba cambiado y más violento, justamente mi madre y él estaba peleados, decide no tomarlos en cuenta y irme a dormir.
Al estar acostada, llega Antonio para darme las buenas noches, era excesivamente dulce, y comenzamos a conversar, me preguntaba de los chicos que me gustaban, de cómo me iba con mis notas, y cada vez se iba acercando más y más, hasta el punto en que comenzó a intimidarme, a decirme que era hermosa… que porque mi madre no era así, comenzó a tocarme… yo intente evitarlo, pero me amenazo diciendo que si no lo dejaba, mataría a mi mamá, y yo me quedaría sola. Tuve que soportarlo y dejar que hiciera esas cosas tan horribles.
A la mañana siguiente amanecí extremadamente pálida, mi madre comenzó a preocuparse pensando en que estaba enferma, pero decidí ir a la escuela de todas formas.
La verdad no quise compartir con nadie mi situación preferí quedarme en la sala de clases callada sin contar nada.
Pasaron los días y comencé a sentirme bastante mal, sentía náuseas, la cabeza me dolía muchísimo. De todas formas intente no demostrárselo a mi madre, lo cual tuvo éxito porque estaba más interesada en su maridito ya que se habían arreglado y estaban mejor que nunca. Mi mejor amiga Elizabeth comenzó a preocuparse, hasta el punto que dijo que quizás estaba embarazada, decidí que debería comprobarlo y junto a ella compramos un test de embarazo... y finalmente así era… esperando un hijo de ese tipo…
Siempre pensé en que si tuviera un hijo seria con el amor de mi vida, esos típicos cuentos de hadas, me fascinaba pensar de esa manera… pero de un segundo a otro mis sueños se rompieron. Al otro día mi amiga que ya tenía algo de experiencia sobre los embarazos me dijo que lo mejor que podía hacer era realizarme un aborto.
La mayoría de las veces estuve en contra de esas cosas… me costo mucho aceptar todo lo que pasaba, pero sencillamente mi amiga me convenció, fuimos al famoso medico que realizaba ese tipo de cosas. La verdad fue bastante simple de lo que esperaba.
A pesar de todo, sentía un vació en mi corazón…porque a pesar de todo era mi hijo, me hubiera gustado ver su carita y sentirlo cerquita mío, entre en una enorme depresión sentía una rabia conmigo misma de cómo quitarle la vida a un ser que no le dieron ninguna oportunidad… y de poco mis ganas de seguir viviendo desaparecían…
Hace unos 5 años mi padre falleció en un accidente automovilístico, mi madre no lograba superar lo sucedido, de a poco sus ganas de vivir se desvanecían. Pasó el tiempo y encontró un nuevo amor, su nombre… Antonio, era alto, moreno y en sus ojos había algo de tristeza. De a poco se fueron enamorando, se casaron y el prometió cuidar de mi…
Aunque hasta anoche, me di cuenta de que jamás su intención fue esa, si no que una muy diferente.
Ayer por la tarde se veía diferente, estaba cambiado y más violento, justamente mi madre y él estaba peleados, decide no tomarlos en cuenta y irme a dormir.
Al estar acostada, llega Antonio para darme las buenas noches, era excesivamente dulce, y comenzamos a conversar, me preguntaba de los chicos que me gustaban, de cómo me iba con mis notas, y cada vez se iba acercando más y más, hasta el punto en que comenzó a intimidarme, a decirme que era hermosa… que porque mi madre no era así, comenzó a tocarme… yo intente evitarlo, pero me amenazo diciendo que si no lo dejaba, mataría a mi mamá, y yo me quedaría sola. Tuve que soportarlo y dejar que hiciera esas cosas tan horribles.
A la mañana siguiente amanecí extremadamente pálida, mi madre comenzó a preocuparse pensando en que estaba enferma, pero decidí ir a la escuela de todas formas.
La verdad no quise compartir con nadie mi situación preferí quedarme en la sala de clases callada sin contar nada.
Pasaron los días y comencé a sentirme bastante mal, sentía náuseas, la cabeza me dolía muchísimo. De todas formas intente no demostrárselo a mi madre, lo cual tuvo éxito porque estaba más interesada en su maridito ya que se habían arreglado y estaban mejor que nunca. Mi mejor amiga Elizabeth comenzó a preocuparse, hasta el punto que dijo que quizás estaba embarazada, decidí que debería comprobarlo y junto a ella compramos un test de embarazo... y finalmente así era… esperando un hijo de ese tipo…
Siempre pensé en que si tuviera un hijo seria con el amor de mi vida, esos típicos cuentos de hadas, me fascinaba pensar de esa manera… pero de un segundo a otro mis sueños se rompieron. Al otro día mi amiga que ya tenía algo de experiencia sobre los embarazos me dijo que lo mejor que podía hacer era realizarme un aborto.
La mayoría de las veces estuve en contra de esas cosas… me costo mucho aceptar todo lo que pasaba, pero sencillamente mi amiga me convenció, fuimos al famoso medico que realizaba ese tipo de cosas. La verdad fue bastante simple de lo que esperaba.
A pesar de todo, sentía un vació en mi corazón…porque a pesar de todo era mi hijo, me hubiera gustado ver su carita y sentirlo cerquita mío, entre en una enorme depresión sentía una rabia conmigo misma de cómo quitarle la vida a un ser que no le dieron ninguna oportunidad… y de poco mis ganas de seguir viviendo desaparecían…
~ Katherine Acevedo
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